La jornada del viernes en SIMOF se ha convertido en una de las que más expectación genera en la pasarela. Además de la vuelta de Aurora Gaviño con una colección fiel a sus señas de identidad y con su característico estilo boho, la tarde tuvo dos nombres propios, el de las diseñadoras Ana Morón y Cristina García.
Jóvenes y con un talento desbordante, ambas son claros exponentes de un virtuosismo flamenco sin igual. Ellas son el exponente, junto a otros diseñadores como Javier García, Pedro Béjar, Patricia Bazarot, Álex de la Huerta o Ernesto Sillero…etc de un nuevo estilo, el «modernismo flamenco» en el que predominan los volúmenes xxl, el gusto por los detalles, la investigación en los tejidos y la mezclas de estampados.
‘Volare’ es el nombre de la nueva colección de Ana Morón y vaya si nos hizo volar. La diseñadora hizo de nuevo alarde de su creatividad sin límites y de su búsqueda de la perfección hecha traje de flamenca. Siempre innovadora, Ana Morón jugó con los detalles como sólo ella sabe hacerlo: escotes, mangas y talles tan diversos y ricamente ornamentados que convierten cada uno de sus trabajos en único. Las flamencas de Ana Morón son exclusivas desde el boceto de diseño pero cobran forma de una manera espectacular sobre la pasarela.
Cristina García se despedía temporalmente de los volantes para dedicarse de lleno a su aventura prêt-á-porter donde le auguro igualmente muchos éxitos. La del Viso volvió a emocionarnos con un recorrido biográfico dedicado a su madre. Mi Dolores es un homenaje a su progenitora cargada de guiños a los años sesenta. Flamencas coquetas y en ocasiones pizpiretas, flamencas yeyé que juegan con los volúmenes extra a los que nos tiene acostumbrados esta diseñadora, generando todo un espectáculo en la pasarela.
Los blancos pulcros y nupciales abrían un desfile en el que vimos amarillos, trajes en rosa salmón y fucsia, verdes aguamarina y un espectacular trabajo en negro con transparencias.
En definitiva unas flamencas que cada vez pisan más fuerte en el real pero que también dejan claro que en moda flamenca podemos hablar de Alta Costura sin complejos.